En nuestra organización 85 niños en situación de vulnerabilidad y riesgo social, reciben además de la merienda, mucho amor, cuidado, contención y respeto. Ayudanos para que podamos seguir transmitiendo valores a través del juego, la lectura y el fútbol y también a que podamos seguir «desempolvando sus alas» para que puedan volar su propio vuelo